¿Qué tan lejos han llegado los científicos para cavar el agujero más profundo de la Tierra? En realidad, han hecho varios esfuerzos, y uno de los más remarcables es el pozo superprofundo de Kola, un proyecto que fue llevado a cabo por la Unión Soviética. Llegar al centro del globo terráqueo no es una tarea fácil, pero aun así los expertos lograron perforar el pozo más profundo del mundo hecho por el hombre en la corteza terrestre, justo en distrito de Pechengsky, la península de Kola (frontera con Noruega), y arrojaron a la luz los hallazgos más interesantes que la humanidad ha podido conocer.
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ToggleEl pozo superprofundo de Kola
El pozo Kola es un agujero al centro de la tierra que tiene más de 12 kilómetros de profundidad y se ubica a 10 kilómetros al norte de la ciudad rusa de Zapolyarny, en el distrito de Pechengsky, en la región de Murmansk, una zona fronteriza con Noruega.
La antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), dio el primer paso en 1962 para poner en marcha un ambicioso proyecto para investigar la litosfera y la transición entre la corteza y manto terrestre (Moho), para acercarse a la superficie de la Tierra. Adelante se explica qué pasó con el proyecto y por qué no siguieron excavando.
Creando el pozo más profundo del mundo: El inicio
Los trabajos de excavación comenzaron el 24 de mayo de 1970, cuando los soviéticos determinaron que el Moho tenía una profundidad de unos 35 kilómetros aproximadamente, aunque en otros continentes puede alcanzar más de 65 kilómetros, ubicándose a unos 10 kilómetros en los océanos.
El proyecto también tenía como objetivo ampliar las investigaciones geofísicas y analizar la composición física y química del Moho.
Son 12,262 km de profundidad los que tiene el agujero Kola. Los soviéticos tardaron casi 20 años en perforar en el Círculo Polar Ártico.
Pozo superprofundo de Kola: Fotos
Son pocas las fotografías que apuntan claramente hacia el hoyo de Kola, puesto que los soviéticos eran muy reservados con sus procesos, sin embargo, en este hilo de tuits se pueden apreciar varias fotos de los trabajos en Zapolyarny.
Datos de la excavación del agujero de Kola
En estos trabajos de máxima perforación en la tierra, los expertos de la URSS, utilizaron sus enormes perforadoras Uralmash-4E y Uralmash-15000, para operar con la potencia necesaria.
El pozo superprofundo de Kola en realidad se compone de varios agujeros que se ramifican desde un hoyo central, los cuales se fueron perforando en tres ciclos: 1970-1983, 1984 y 1985-1992.
El pozo más profundo es el SG-3, que tiene 2,54 centímetros de diámetro y una extensión de 1,6 kilómetros.
La broca del taladro se encontraba a un tercio del camino a través de la corteza continental báltica para llegar a tocar el manto de la Tierra. Este agujero en Rusia se convirtió en el pozo más grande del mundo y, además, ofreció un vistazo directo a la estructura de la corteza. No obstante, un error de cálculo hizo que la perforación cesara e impidió que los expertos llegaran más abajo.
Los soviéticos habían registrado una temperatura de 212 °F (100 °C) pero en el último pozo se toparon con 365 °F (185 °C), con esos grados de calor las máquinas ya no podían trabajar la tierra, puesto que cuanto más calor exista, más líquido será el ambiente y será imposible mantener el hoyo.
Fin del proyecto: “Pozo superprofundo de Kola”
El plan de los soviéticos de excavar el agujero más profundo de la tierra marcó un antes y un después en la investigación de la corteza terrestre. El proyecto concluyó en 1992, sin llegar a los 13,500 kilómetros de profundidad.
Además del inconveniente con la temperatura elevada, descubrieron que el pozo de Kola tenía una roca con mayor porosidad y permeabilidad. En pocas palabras, era una zona parecida a un plástico.
El proyecto se detuvo en medio del desorden que se vivió en la Rusia postsoviética y el viaje al centro de la Tierra quedó en el olvido. El pozo se encuentra abandonado y la entrada está sellada con una placa metálica.
¿Por qué el pozo de Kola representa un hito para la ciencia?
El pozo de Kola representa un hito para la ciencia porque gracias a los datos obtenidos, se pudo obtener información real sobre riesgos geológicos, la evolución de la Tierra y los cambios ambientales con miras al futuro.
Hallazgos que se realizaron en el pozo más profundo del mundo
Este proyecto de hacer un agujero profundo en la tierra con fines científicos y geológicos arrojó a la luz enormes cantidades de datos, la mayoría de los cuales lograron esclarecer algunas dudas que existían sobre el planeta. Esta es la información más relevante:
Ausencia de la discontinuidad de Conrad
Uno de los hallazgos principales que hicieron los soviéticos fue la ausencia de la transición de granito a basalto, mejor conocida la discontinuidad de Conrad para relacionarla con la reflexión sísmica.
Los expertos esperaban que existiera entre 3 y 6 kilómetros de profundidad, pero nunca hallaron la capa de basalto. En su lugar, determinaron que la roca granítica tenía una extensión que iba más allá del punto de los 12 kilómetros.
Descubrieron que la reflexión sísmica ocurría por un cambio metamórfico en la roca, es decir, debido al calor y la presión que se intensifican en la profundidad, y no por un cambio en el tipo de roca, como creían anteriormente.
Agua en la profundidad
Si bien pensaban que podrían encontrar agua en alguna parte de su perforación y lo hicieron, pero en profundidades que no habían calculado.
Inesperadamente, en el “pozo del infierno en Rusia”, descubrieron grietas abiertas llenas de agua salada, lo que indica que la corteza no es densa, pero cuenta con vías que permiten el paso de fluidos.
Los investigadores supusieron que el agua pudo haber sido expulsada de los cristales de roca, impulsados por presión increíblemente alta dentro de la Tierra.
Actividad biológica
Los soviéticos descubrieron que había actividad biológica en las rocas. A 7 kilómetros de profundidad, encontraron docenas de fósiles de organismos marinos unicelulares que datan de hace 2 mil millones de años, de la era Precámbrica, donde se originaron las rocas ígneas y metamórficas.
Se toparon con fósiles microscópicos encerrados en compuestos orgánicos que estaban intactos a pesar de las presiones y temperaturas extremas de la roca del pozo Kola.
La Tierra tiene gas
Los científicos quedaron sorprendidos porque, a lo largo del pozo, encontraron helio, hidrógeno, nitrógeno e incluso dióxido de carbono que se extrajeron de los microbios que están presentes en el hoyo.
Leyendas y rumores aterradores que le dieron el pseudónimo de “puerta al infierno” al pozo de Kola
El pozo superprofundo de Kola, sigue siendo una de las reliquias más importantes de la ciencia de la era soviética, pero también creó una nube de leyendas y rumores que sellaron su fama.
La “puerta al infierno”
La leyenda se originó gracias a un maestro noruego que quería comprobar la credulidad de sus amigos cristianos de Estados Unidos. Sorpresivamente, la historia de que la profundidad del pozo de Kola daba hacia el infierno se difundió a través de los medios fundamentalistas cristianos y apareció en los periódicos.
El mito sostiene que la perforación del pozo superprofundo de Kola tuvo que detenerse cuando se encontraron con temperaturas extremadamente altas. Después, introdujeron un micrófono en el pozo y lograron gritos espantosos que provenían del infierno.
Los gritos desesperados del pozo superprofundo de Kola
Los mitos que rodean al pozo más profundo del mundo también sugieren que los habitantes de Zapolyarny empezaron a escuchar los gritos desesperados de las almas que están encerradas en la “puerta al infierno”.
Dicen los rumores que las personas que viven en las cercanías todavía pueden oír voces que piden auxilio. De hecho, existen muchos vídeos en YouTube con audios que supuestamente se grabaron en el sitio.
¿Por qué el pozo superprofundo de Kola se volvió una leyenda?
El pozo superprofundo de Kola se volvió una leyenda porque los científicos de la URSS eran celosos con sus datos y la información del proyecto se manejó con mucho hermetismo.
Otras excavaciones científicas de gran envergadura
Mientras las grandes potencias del mundo estaban en la carrera espacial, en la tierra firme se desplegó una competencia para ver quién podía llegar más lejos en la corteza terrestre y dar con el núcleo de la Tierra. A continuación, se presentan otras excavaciones importantes:
Proyecto Mohole
Antes de que Rusia lograra triunfar con sus hallazgos en Kola y destronara al pozo Bertha Rogers de Oklahoma, los científicos estadounidenses hicieron su primera grieta en el manto en 1958 con el Proyecto Mohole. Perforaron el fondo del Océano Pacífico frente a Guadalupe, en México.
El objetivo era obtener una muestra de material del manto terrestre hasta encontrar la Discontinuidad de Mohorovicic (Moho). En marzo y abril de 1961, perforaron cinco pozos, uno de los cuales se extendía 183 pies por debajo del lecho marino. La primera capa de corteza se extendía 169 metros y contenía sedimentos de la era del Mioceno, que datan de más de 23 millones de años.
En la segunda capa encontraron basalto y el hallazgo tenía un futuro prometedor para seguir excavando, sin embargo, los altos mandos decidieron que el proyecto sería demasiado costoso y decidieron cancelarlo en 1966, mucho antes de que alcanzaran el manto.
Programa de Perforación Profunda Continental Alemán
En 1990, Alemania se sumó a la carrera por el viaje hacia el centro de la Tierra y puso en marcha el Programa de Perforación Profunda Continental Alemán, en Bavaria.
Los investigadores alemanes atravesaron las placas sísmicas y se toparon con temperaturas de hasta 600 °F. Lograron perforar otros 9 km de profundidad con su pozo KTB, hasta que se quedaron sin fondos para seguir con el proyecto.
A pesar de que no pudieron hacer mucho más que Rusia, acumularon nuevos datos y conocimientos sobre la actividad sísmica y la composición de la corteza.
El barco Chikyū
El buque de perforación japonés especializado Chikyū, quiere reclamar el récord del agujero en alta mar más profundo perforado con fines científicos. Su hoyo se encuentra a unos tres kilómetros por debajo del fondo del mar.
Es posible que llegar a la corteza le tome docenas de años al barco japonés y que se inviertan más de 1 mil millones en el proyecto. Mientras tanto, se sabe que Chikyū tiene la capacidad de transportar hasta 6 millas de tubos de perforación a la vez, pero el problema reside en que:
- Las brocas tienen una vida útil limitada
- Las altas temperaturas pueden deformar los equipos de trabajo
- Se puede formar un desastre en el pozo.
¿Por qué es tan difícil perforar en máximas profundidades?
Es tan difícil perforar en máximas profundidades porque se requiere de estudios de mapeo y sismología, para poder medir el impacto de trabajar con temperaturas que pueden superar los 4.000 °F.
El pozo superprofundo de Kola, más allá de crear una leyenda y ser un emblema de la Guerra Fría, marcó un precedente y representó un logro tecnológico impresionante en el ámbito científico de la Unión Soviética, que tenía toda la disposición de investigar y llegar más allá del Moho. Crearon el pozo más profundo del mundo y obtuvieron información valiosa sobre la estructura interna de la Tierra que sirvió para que las grandes potencias siguieran explorando la historia y la evolución del planeta.